Otra visión en la educación

Propuesta de actividades

Contenido

Ubicación de las personas y los objetos en el espacio con relación a un punto de referencia. El punto gráfico.

Objetivo

Representar el espacio físico teniendo en cuenta los diferentes planos de ubicación de los objetos que se encuentran en él.

Problemática

En dos fotos de un mismo paisaje, pueden verse: en una de ellas, una forma no identificada, que aparece como una mancha o espacio en blanco, y en la otra, en el mismo sitio, se veía como un punto. El alumno tiene que imaginar de qué objeto se trata en la primera foto, y por qué se ve como un punto en la segunda. Para ello debe pensar, imaginar, relacionar ubicaciones y tamaños de los objetos según su percepción e imaginación.

Preguntas motivadoras

Julia se preguntó:

• - ¿Qué será esa mancha o forma no identificada que aparece en la foto del paisaje?
• - ¿Qué habrá querido captar esa persona con su cámara fotográfica?
• - ¿Qué objeto podrá ser por el tamaño y forma que tiene y por el lugar en el que está?
• - ¿Y el punto que se ve en la otra fotografía del mismo paisaje? ¿Por qué donde en una foto se ve una mancha, en la otra se ve un punto?

El docente registra las respuestas de los alumnos que considere más interesantes.

Primera actividad: Sensibilización – Trabajo individual

• - Imagina qué puede ser esa mancha o forma no identificada que Julia ve en la foto.
• - Piensa por qué luego se ve como un punto.

Nota: Tener en cuenta que, para representar el espacio de forma bidimensional, es necesario establecer planos de percepción por los cuales los objetos más cercanos se ven y, por lo tanto, se los representa más grandes, mientras los demás objetos van disminuyendo su tamaño a medida que están más lejos, hasta percibirse como un punto.

Se establecerán, entonces, tres planos principales en el espacio: el primer plano, el plano intermedio y el tercer plano, y se ubicarán los objetos en él variando su tamaño.

El docente entrega a cada uno de los alumnos una imagen de un paisaje, en la que pueda verse -preferentemente en el centro- una pequeña forma en blanco, no definida. (El maestro puede, también, fotocopiar una de las dos imágenes anteriormente expuestas, entregárselas a los alumnos y trabajar sobre ellas). Propone:

• - Dibuja sobre la mancha blanca lo que te imaginas que puede representar.
• - Muestra a tus compañeros el trabajo, comenta lo que has imaginado y dibujado, y explica por qué.
• - Dibuja en la misma imagen otros objetos, uno que esté más cerca y otro más lejos del que dibujaste anteriormente.

Capacidades que el niño trabaja:

• - La asociación del todo con las partes.
• - La asociación de formas y tamaños.
• - La imaginación en relación con lo que se percibe.
• - La relación de espacio.
• - La justificación y criterio personal sobre lo imaginado y realizado.

Registro de actividades

Los trabajos y comentarios presentados en este capítulo pertenecen al Jardín de Infantes del Colegio “Nuestra Señora” de la ciudad de Lincoln, Provincia de Buenos Aires, Argentina.

Cuando el docente les muestra a los niños las dos imágenes propuestas, los alumnos manifiestan que la diferencia entre ambas manchas se debe a que “una está más lejos y en la otra más cerca” y comienzan a especular a cerca de qué objeto puede verse en las imágenes.

Luego, les entrega las dos imágenes para que dibujen el objeto de acuerdo a la distancia en la que se encuentran, pero los niños dibujan, en ambas, objetos diferentes sin tener en cuenta la distancia desde la que se los observa.

Al analizar los resultados de la experiencia se consideró adecuado realizar algunos ajustes en la propuesta didáctica con el fin de lograr una mayor reflexión por parte de los niños y del docente acerca de las diferencias en los planos de percepción para lograr una adecuada representación del espacio tridimensional.

Segunda actividad: Observación y descubrimiento – Trabajo en pareja

El docente prepara pares de tarjetas con de diferentes formas irregulares (manchas) y le entrega una tarjeta a cada niño. A continuación, pide que busquen al compañero que tiene la misma forma y que se reúnan con él^(*).

Luego les propone:

• - Busquen una mancha o forma no definida dentro de la sala (en las paredes, en el piso, en el armario, etc.), y recuerden cuál es.
• - Guíen a sus compañeros para que la descubran, sin decir de qué mancha o forma se trata. Para guiarlos, tienen que darles pistas como, por ejemplo: a qué elemento concreto se parece, en qué lugar se encuentra (arriba de..., abajo de..., a la derecha de..., etc.) y qué tamaño tiene en relación con otras manchas o formas que haya en la sala.
• - Escuchen las respuestas de sus compañeros hasta que descubran cuál es la mancha.
• - Observen la mancha o forma elegida y dibújenla en una hoja, en el lugar y del tamaño que quieran.
• - Imaginen a qué se parece y transfórmenla en lo imaginado dibujando y pintando sobre ella.
• - Dibujen y pinten el lugar (contexto) en el que podría estar ese objeto y otros que puedan estar más lejos y más cerca de él.
• - Expongan el trabajo y coméntenlo con sus compañeras.

Capacidades que el niño trabaja:

• - La visualización y observación.
• - La imaginación.
• - El descubrimiento.
• - La asociación de formas.
• - La ubicación de los elementos en el espacio.
• - La relación de tamaños.
• - La relación con el otro.
• - La justificación y criterio personal sobre lo imaginado y realizado.

Registro de actividades

En esta actividad, se solicitó a los niños que buscaran diferentes manchas en las paredes de la sala y verbalizaran dónde estaban ubicadas en el espacio con respecto a otros objetos allí presentes.

Unos emplearon la terminología correcta (arriba de..., debajo de..., etc.), mientras que a otros les resultó más difícil hacerlo, e indicaron el lugar mediante movimientos de manos y brazos.

En general, no les costó adaptar la forma o mancha a un elemento concreto; lo que les resultó más difícil fue ponerse de acuerdo con el compañero.

Mostraron sus dibujos e hicieron comentarios como:

Miranda:
-La mancha que está en el medio es el Sol, al lado de las nubes. Más cerca, estoy yo, mi casa y las flores, y, lejos, las mariposas.

Colombaro:
-En el medio hay una araña que se escapó de su casa. Las otras casas están lejos y en las puntas y ahora no sabe cuál es la suya.

Benjamín
-La araña está en medio de las nubes, el Sol está lejos y las amigas arañas, cerca.

Luisa:
-Como llueve, las gotas están arriba; los paraguas que me tapan están en el medio y los charcos, abajo, en el suelo.
- ¿Qué es lo que está más cerca? –le pregunta la maestra.
-Los charcos de agua -responde Luisa.

(*) Nota: Esta es sólo una sugerencia para formar grupos democráticamente. El docente puede armar los grupos del modo que más le convenga.

Tercera actividad: Integración - Trabajo grupal

Juego integrador

1. Se forman grupos de cuatro alumnos.

Para armar los grupos correspondientes, el docente coloca en una caja una serie de tarjetas, cada una con el dibujo de una mancha transformada en un punto. Debe haber cuatro tarjetas con una mancha-punto del mismo tamaño. Habrá tantos tamaños de manchas-punto como cantidad de grupos haya que formar.

2. Cada alumno toma de la caja una tarjeta e integra el grupo constituido por la mancha-punto del mismo tamaño. ^(*)

El docente tendrá preparadas tantas hojas como grupos haya, y cada una de ellas tendrá dibujada la mancha-punto del tamaño correspondiente a cada grupo.

3. Los integrantes de cada grupo toman la hoja que le corresponde, imaginan qué podría ser esa mancha-punto, lo comentan entre sí y, cada uno de ellos, en esa misma hoja, dibuja otra mancha-punto, similar a la que están allí, más grande o más pequeña, y en el lugar que desee.

Cada grupo muestra a todos sus compañeros la distribución de las manchas-punto que dibujaron. El docente guía las reflexiones de los alumnos, para que puedan explicitar las relaciones espaciales de acuerdo con los conceptos que se vienen trabajando (cerca-lejos).

Cada grupo intercambia su hoja con otro grupo. Deben:

- Imaginar qué podrían ser las manchas-punto del trabajo de sus compañeros, según su ubicación (arriba-abajo, delante-detrás, etc.) y tamaño.

- Dibujar y pintar sobre las manchas-punto lo imaginado.

4. Se exponen los trabajos.

5. Cada grupo cuenta lo que creyó ver o imaginó en esas manchas-punto.

El docente interviene para favorecer el intercambio y ayudar a que los niños verbalicen lo que imaginaron de las manchas-punto representados de acuerdo con su ubicación en el espacio y su relación con las otras manchas-punto dibujadas en la hoja.

(*) Nota: Esta es sólo una sugerencia para formar grupos democráticamente. El docente puede armar los grupos del modo que más le convenga.

Capacidades que el niño trabaja:

- La asociación de forma y color.

- La imaginación.

- La observación y la asociación.

- La ubicación de los elementos en el espacio.

- El trabajo grupal.

- La justificación y criterio personal sobre lo imaginado y realizado.

"Globos, se van lejos, otros muy lejos". Candela

"El Sol está lejos, pero es grande". Máximo

Registro de actividades

La mayoría de los niños dibujan manchas-punto en los tres planos de la percepción, pero no tienen en cuenta el tamaño de las mismas para diferenciar las que están más cerca de las que están más lejos. Entonces, la maestra muestra imágenes (la de ellos mismos en el trabajo anterior) para que noten la diferencia de tamaños de los objetos de acuerdo con la distancia en que están ubicados.

El docente les devuelve las hojas a los grupos y los niños dibujan objetos sobre algunas de las manchas-punto. Cuando vuelven a presentar sus trabajos, indican qué objetos están más cerca y cuáles más lejos y, aunque, en la mayoría de los casos no consideran los tamaños, fundamentan y describen adecuadamente la posición de los objetos en el espacio representado.

Cuarta actividad: Simbolismo

El docente coloca en el frente una lámina con el dibujo de diez objetos distribuidos en forma aleatoria, y numerado del 1 al 10. Por ejemplo: ^(*)

Le entrega a cada niño una tarjeta que contenga diez puntos, distribuidos de la misma manera que los objetos de la lámina, pero sin los dibujos y sin los números. Ejemplo:

Les pide a los niños que observen los dibujos que están al frente y coloquen, al lado de cada punto de su tarjeta, el número correspondiente al dibujo que consideran debería ocupar ese lugar en el espacio con relación al resto de los objetos. Por ejemplo, más lejos el Sol (9) y la estrella (6); más cerca, la tortuga (8) y el árbol (5); en el medio, la pelota (7) y el barrilete (10), etc.).

Se intercambian las tarjetas entre los compañeros. Cada niño tiene que buscar al frente, según los números que figuran en la tarjeta recibida, los dibujos correspondientes a los mismos, y dibujarlo. * Ejemplo:

El trabajo vuelve al niño que colocó los números en los puntos. Éste debe completar la imagen dibujando y pintando el contexto en el cual podrían estar ubicados esos objetos.

Se exponen todas las tarjetas. Cada alumno describe los elementos dibujados y explica cuál es su ubicación en el espacio con relación a los demás objetos.

(*) Nota: El docente evaluará el grado de dificultad que puede tener su grupo para establecer la cantidad de números que se utilizarán en la codificación de los dibujos, el cambio de tarjetas y el tipo de dibujos.

Capacidades que el niño trabaja:

- La observación.

- La asociación.

- La utilización de diferentes códigos.

- La ubicación y la relación de los elementos en el espacio.

- La representación gráfica en el espacio.

- La verbalización de las acciones realizadas.

- La justificación y criterio personal sobre lo imaginado y realizado.

Juan

Paula

Registro de actividades

En general, les costó realizar por primera vez esta actividad.

En los casos presentados sólo el Sol, fue ubicado por los niños en el espacio adecuado, el resto de los objetos fueron ubicados libremente, sin tener en cuenta el lugar o cambiando los objetos.

En caso que sucediera esto, después de un breve período, el docente debería realizar una actividad similar para seguir ejercitando la percepción visual- espacial- bidimensional.

Trabajo de arte

Aclaración:

Tanto las preguntas como las propuestas de actividades dependerán, del nivel intelectual de los niños; el docente determinará la complejidad de las mismas de acuerdo a las posibilidades que éstos tengan de realizarlas. Modo contrario, se verán frustrados o desinteresados y no se cumplirá con el objetivo.

También se aclara que éstas no son clases exclusivamente de arte; es la conjunción de arte y geometría.

Actividades:

Aquí se trabajarán dos maneras en las que diferentes artistas plásticos han incluido el punto en sus obras de arte: 1) con relación a la representación de las distancias en el espacio (cerca – lejos), que hacen que la imagen alejada pueda llegar a divisarse como un punto, y 2) como representación abstracta, como la intersección de dos rectas y como una expresión artística significativa.

Primer caso: La observación del punto con relación a la representación de los objetos en el espacio lejano.

Se dice que Giotto (1266-1337) ha cambiado el arte de pintar. Efectivamente, es quien inauguró el espacio tridimensional en la pintura y, por ello, es considerado el antecesor del Renacimiento. La introducción de la perspectiva en este período marcó una etapa decisiva en la representación del espacio. Los planos se superpusieron y se representaron siluetas robustas y majestuosas. También la relación en los tamaños de los objetos (más grandes y más pequeños) y el color y el valor (más fuerte o más suave, más claro y más oscuro) contribuyeron a la sensación de cercanía y alejamiento de los objetos.

La perspectiva constituye sin duda uno de los principales rasgos del Renacimiento.

Segundo caso: El punto como elemento de la obra de arte.

Kandinsky (1866-1944) fue precursor del empleo del punto y la línea como elementos gráficos para representar obras artísticas significativas. Realizó estudios e investigaciones sobre este tema, y llegó a expresar que el punto puede constituir, por sí mismo, una obra de arte. Decía: "la nueva ciencia artística sólo podrá surgir cuando los signos se vuelvan símbolos y el ojo y el oído abiertos permitan saltar del silencio a la palabra. El punto constituye la imagen primaria de la expresión artística".

Veremos, en su obra y en la de otros artistas, cómo el punto llega a inspirar nuestra imaginación.

El docente llevará, a la sala o a la biblioteca del Jardín, libros, revistas, material fílmico u otro material a su disposición donde puedan apreciarse obras de diferentes artistas que representen el espacio (por ejemplo, las distancias: cerca, lejos, muy lejos) con distintos criterios, utilizando los elementos de la plástica (tamaño, superposición, color o valor). Los niños tendrán la oportunidad de ver, apreciar las obras e intercambiar, con sus compañeros y con el docente, sus observaciones, ideas y criterios. ^(*)

Aquí sugerimos algunas obras, y proponemos preguntas y actividades para trabajar con ellas, pero el docente, si lo desea, puede elegir otras, siempre que respondan a la intención del trabajo.

Obras sugeridas

- “La Gioconda”, de Leonardo da Vinci.

- “El lavatorio”, de Tintoretto.

- “Corte de un mueble-alimento” (detalle), de Salvador Dalí.

- “Curvas libres dirigidas hacia un punto”, de Wasili Kandinsky.

Preguntas motivadoras

1. Presentar a los niños la obra de Leonardo da Vinci. Luego, preguntar:

- ¿Qué se ve en el cuadro?

- ¿Qué hace el personaje?

- ¿Dónde está ubicado?

- ¿Qué se ve detrás del personaje?

- ¿Cómo se ve lo que está atrás del personaje, lejos o cerca? ¿Por qué?

2. Presentar las obras de Tintoretto y de Salvador Dalí y, a continuación, preguntar a los alumnos respecto de cada una de ellas:

- ¿Qué se ve en el cuadro?

- ¿Qué hace cada personaje?

- ¿Cómo están distribuidos los elementos en el espacio del cuadro: ¿qué hay en el centro, más cerca y más lejos?

- ¿Qué objetos o personajes son los que están en el primer plano, cuáles en los planos intermedios y cuáles en los últimos planos?

3. Por último, presentar a los niños la obra de Kandinsky y preguntar respecto de ella:

- ¿Qué se ve en el cuadro?

- ¿Qué diferencia existe entre los cuadros anteriores y éste?

- ¿Te gusta? ¿Por qué?

- ¿Qué te parece que quiso representar el autor?

- En este cuadro ¿hay distintos planos?

4. Registrar las respuestas de los niños.

Propuestas de actividades

1. Dar a los niños las siguientes consignas:

- Averigua el nombre del autor del cuadro y todo lo que desees saber sobre la obra de ese artista.

- Busca en libros, revistas, Internet, etc., obras de artistas plásticos en las que haya distintos elementos, unos en un primer plano, otros en el espacio intermedio y otros más lejos. Busca, también, obras en las que el punto cumpla un papel significativo. Nombra a los autores.

- Dibuja y pinta, los elementos que desees, o recorta imágenes, o los elementos que desees, y crea tu propio cuadro con características similares a las de las obras que has visto, es decir que los objetos o personajes deben estar ubicados unos más cerca y otros más lejos. (Otra propuesta puede se: Crea tu propio cuadro e incorpora, en tu expresión, el punto como elemento significativo).

2. Orientar y ayudar en la búsqueda del material, y acompañar la actividad artística de los alumnos.

3. Una vez finalizada la actividad, proponer a los alumnos que analicen las diferencias y semejanzas de sus trabajos con las obras de artistas observadas. El objetivo es que el niño, a través de la observación, descubra el modo en que está representado el espacio en ellas, luego intente hacer su propia representación y finalmente, realice una autoevaluación.

4. Exponer los trabajos de los niños en la sala o en algún otro lugar de la escuela, e invitar a todos los alumnos, docentes, y a la comunidad a en general. Los niños serán los guías de la exposición, es decir que explicarán lo que quisieron representar en sus propios trabajos.

(*) Si la institución contara, en su lugar de residencia, con la posibilidad de recorrer museos o salas de exposiciones de artistas plásticos, sería conveniente organizar visitas, pues los alumnos podrían apreciar allí las variables trabajadas en clase en un contexto relacionado con el arte.

Registro de actividades

Andrea. Amiga de la Gioconda

Santiago. Yo soy Kandinsky

La docente trabajó con las obras de Leonardo y Kandinsky.

Los alumnos comenzaron, primero, a descubrir los planos cerca y lejos.

Al observar la obra de Kandinsky, una de las alumnas, comentó:

- No hay líneas enteras sino mitad de línea de círculo.

Otra niña agregó:

- Hay como rayitas que se mueven, algunos círculos pequeños.

Y otros dicen:

- Hay algunos triángulos que se ven lejos.

- Hay círculos grandes, rectángulos pequeños.

- Hay líneas que parecen olas.

- Hay figuras diferentes.

- Representan música, líneas, cuadros, cuerdas de guitarra.

Anexo

Alumnos de la institución, Centro de Educación Inicial CETP, de Montevideo, Uruguay, realizaron la segunda actividad: observación y descubrimiento – trabajo en parejas, con los siguientes resultados:

La maestra leyó el siguiente texto y trabajaron a partir de él.

LA MANCHA DE HUMEDAD

Juana de Ibarbourou (1892 – 1979)

Extraído de “Chico Carlo” (1944)

Hace algunos años, en los pueblos del interior del país no se conocía el empapelado de las paredes. Era éste un lujo reservado apenas para alguna casa muy importante, como el despacho del Jefe de Policía o la sala de alguna vieja y rica dama de campanillas. No existía el empapelado, pero sí la humedad sobre los muros pintados a la cal. Para descubrir cosas y soñar con ellas, da lo mismo. Frente a mi vieja camita de jacarandá, con un deforme manojo de rosas talladas a cuchillo en el remate del respaldo, las lluvias fueron filtrando, para mi regalo, una gran mancha de diversos tonos amarillentos, rodeada de salpicaduras irregulares capaces de suplir las flores y los paisajes del papel más abigarrado.

En esa mancha yo tuve cuanto quise: descubrí las Islas de Coral, encontré el perfil de Barba Azul y el rostro anguloso de Abraham Lincoln, libertador de esclavos, que reverenciaba mi abuelo; tuve el collar de las lágrimas de Arminda, el caballo de Blanca Flor y la gallina que pone huevos de oro; vi el tricornio de Napoleón, la cabra que amamantó a Desdichado de Brabante y montañas echando humo de las pipas de cristal en que fumaban sus gigantes o sus enanos. Todo lo que oía o adivinaba, cobraba vida en mi mancha de humedad y me daba su tumulto o sus líneas. Cuando mi madre venía a despertarme todas las mañanas, generalmente ya me encontraba con los ojos abiertos, haciendo mis descubrimientos maravillosos. Yo le decía con las pupilas brillantes, tomándole las manos:

–Mamita, mira aquel gran río que baja por la pared. ¡Cuántos árboles hay en sus orillas! Tal vez sea el Amazonas. Escucha, mamita, cómo chillan los monos y cómo gritan los guacamayos.

Ella me miraba espantada:

– ¿Pero es que estás dormida con los ojos abiertos, mi tesoro? ¡Oh, Dios mío!, esta criatura no tiene bien su cabeza, Juan Luis.

Pero mi padre movía la suya entre dubitativo y sonriente, y contestaba posando sobre mi corona de trenzas su ancha mano protectora:

–No te preocupes, Isabel. Tiene mucha imaginación, eso es todo.

Y yo seguía viendo en la pared manchada por la humedad del invierno, cuanto apetecía mi imaginación: duendes y rosas, ríos y negros, mundos y cielos. Una tarde, sin embargo, me encontré dentro de mi cuarto a Yango, el pintor. Tenía un gran balde lleno de lechada de cal y un pincel grueso como un puño de hombre, que introducía en el balde y pasaba luego concienzudamente por la pared, dejándola inmaculada. Fue esto en los primeros días de mi iniciación escolar. Regresaba del colegio, con mi cartera de charol llena de migajas de bizcochos y lápices despuntados. De pie en el umbral del cuarto, contemplé un instante, atónita, casi sin respirar, la obra de Yango, que para mí tenía toda la magnitud de un desastre. Mi mancha de humedad había desaparecido, y con ella mi universo. Ya no tendría más ríos ni más selvas.

Inflexible como la fatalidad, Yango me había desposeído de mi mundo. Algo, una sorda rebelión, empezó a fermentar en mi pecho como una burbuja que, creciendo, iba a ahogarme. Fue de incubación rápida cual las tormentas del trópico. Tirando al suelo mi cartera de escolar, me abalancé frenética hasta bocaza redonda como una O de gigantes, se quedó unos minutos enarbolando en el vacío su pincel que chorreaba líquida cal y pudo preguntar por fin lleno de asombro:

– ¿Qué le pasa a la niña? ¿Le duele un diente, tal vez?

Y yo, ciega y desesperada, gritaba como un rey que ha perdido sus estados:

– ¡Ladrón! Eres un ladrón, Yango. No te lo perdonaré nunca. Ni a papá, ni a mamá que te lo mandaron. ¿Qué voy a hacer ahora cuando me despierte temprano o cuando tía Fernanda me obligue a dormir la siesta? Bruto, odioso, me has robado mis países llenos de gente y animales. ¡Te odio, te odio; los odio a todos!

El buen hombre no podía comprender aquel chaparrón de llanto y palabras irritadas. Yo me tiré de bruces sobre la cama a sollozar tan desconsoladamente, como sólo he llorado después cuando la vida, como Yango el pintor, me ha ido robando todos mis sueños. Tan desconsolada, e inútilmente. Porque ninguna lágrima rescata nunca el mundo que se pierde ni el sueño que se desvanece... ¡Ay, yo lo sé bien!

Después de la lectura, cada alumno imaginó la mancha de humedad y trabajó en base a ella.

Aclaración:

Para ampliar la propuesta se sugiere realizar una actividad de otra área curricular que responda a la motivación planteada. El docente puede realizar la que aquí se presenta y/u otras, según los intereses de los niños o las necesidades del docente.

Integración didáctica

Actividades para El ambiente natural y social o área de Ciencias Sociales

Objetivos:

- Identificar cambios y permanencias a través del tiempo, de las costumbres y las actividades humanas.

- Reconstruir la historia familiar a partir de imágenes y objetos.

Contenidos:

- Costumbres y actividades humanas en diferentes épocas.

- La historia familiar.

Conflicto

Julia descubrió, entre las fotos que le entregó su mamá, que, además de las fotos que había encontrado con el objeto desconocido, habían, también, fotos de su abuelo, de sus bisabuelos, de sus padres y de varias personas amigas de ellos. “¡Qué diferentes unas a otras! ¿Por qué será?” –se preguntó.

Propuesta de actividades

Primera actividad:

El docente solicita a los niños:

- Traer fotos de sus padres cuando eran niños, de sus abuelos y de sus bisabuelos o de otros familiares o amigos.

- Pedir a sus padres que les cuenten alguna anécdota, acontecimiento o suceso que les haya pasado cuando eran pequeños.

- Solicitar a sus abuelos que les escriban una lista de los juegos y juguetes con los que jugaban cuando eran niños.

- Realizar un cartel con el nombre del lugar en dónde nacieron sus bisabuelos (su ascendencia). Si fueran de otro país o provincia, averiguar por qué viven ahora aquí, desde cuándo y cómo llegaron, etc.

Una vez finalizada la actividad realiza las siguientes preguntas:

- ¿Por qué les parece a ustedes que unas fotos son tan distintas a las otras, como, por ejemplo, el color, la ropa, los peinados, los juguetes...?

- ¿Existirá ahora todo lo que se ve en las fotos más antigua? ¿Qué les parece que si, qué les parece que no? ¿Qué les parece distinto?

Registra las respuestas de los niños.

Segunda actividad:

El docente propone a los alumnos averiguar la inquietud de Julia y solicita:

- Colocar todas las fotos que han traído sobre la mesa.

- Separar las que parecen que, por un motivo o por otro, son distintas.

- Describir las diferencias encontradas.

Anota estas últimas en una hoja que coloca a la vista de todos.

Solicita que:

- Nombren los elementos iguales o semejantes que encuentren entre las fotos.

Anota las respuestas en la hoja que está a la vista de todos.

Les pide:

- Relatar la anécdota, suceso o acontecimiento que les hayan contado los padres. Luego contar alguno en el que ellos hayan participado.

- Leer la lista que trajeron con los juguetes y juegos con los que jugaban los abuelos y cómo eran sus juguetes o juegos.

- Presentar los carteles con el nombre del lugar donde nacieron los bisabuelos y ubicarlos dentro o fuera de un dibujo del contorno de la Argentina.

Una vez finalizada la actividad realiza las siguientes preguntas:

- ¿Encontraron muchas diferencias entre las fotos de sus padres cuando eran pequeños con las de ahora? ¿Cuáles?

- ¿Qué diferencias encontraron entre las fotos de sus abuelos y bisabuelos con las actuales?

Registra las respuestas de los niños.

Tercera actividad:

El docente:

- Entrega a cada niño una hoja.

- Solicita que seleccionen algunas de las fotos que trajeron, las que sean más antiguas y las más actuales.

- Pide que peguen las más antiguas a un costado de la hoja y, las más actuales, al otro costado.

- Invita a descubrir las diferencias entre ambas y, de acuerdo al criterio de cada uno, marcar al lado de la foto con un lápiz de color, los elementos que crean más diferentes.

- Solicita a los niños que muestren sus hojas y expliquen a sus compañeros el por qué de dicha selección.

Una vez finalizado el trabajo propone la siguiente actividad:

Pide que imaginen o inventen frases con algunos de los elementos de las fotos que marcaron anteriormente con color y que se las dicten al docente para que las escriba.

El docente puede proponer a los alumnos que inviten a alguno de sus abuelos, bisabuelos o algún otro pariente o amigo, a conversar con los niños y dar respuesta, en forma directa a preguntas, interrogantes e inquietudes de los mismos.

Capacidades que el niño desarrolla:

- La observación.

- La percepción del tiempo pasado.

- La curiosidad.

- La búsqueda de información.

- La expresión verbal y escrita.

- La comprensión.

- La identificación de los cambios y permanencias.

- La identificación de semejanzas y diferencias.

- La valoración del pasado.

Tecnología educativa

Primera propuesta

Actividades

El docente:

- Lee nuevamente el cuento “Una caja de sorpresas” y se detiene en el momento en el que Julia encuentra las fotos en la caja.

- Solicita a los niños que imaginen qué fotos podrían ser las que estaban adentro de esa caja, qué objetos, personas, animales, etc. podrían tener cada una de ellas y en qué lugares, dentro del espacio, estarían ubicados.

- Ubica a los niños en las computadoras, en parejas y solicita que, con las herramientas del programa elegido y disponible, compongan una foto pensando en las que pudo haber encontrado Julia dentro de la caja, ubicando los objetos y demás elementos: personas, animales, etc. en el espacio de la foto, teniendo en cuenta los tamaños, de acuerdo si se encuentran más próximos o más alejados. Establece un tiempo de trabajo.

- Sugiere el agregado de color u otros detalles, explorando las herramientas del programa, colocando sus nombres al trabajo.

- Guía la reflexión, los comentarios, las preguntas y toda inquietud que los alumnos tengan.

Bibliografía general de este capítulo

Coll, C. (1991): Aprendizaje escolar y construcción del conocimiento, Buenos Aires, Paidós.

Dalí, Salvador, “Corte de un mueble-alimento” (detalle), Los hombres de la Historia, Dalí, Buenos Aires, Página/12-Centro de Editor de América Latina.

Da Vinci, Leonardo, La Gioconda, (Museo del Louvre), Obras Maestras de la Pintura Clásica, Buenos Aires/Madrid/Río de Janeiro, Codex.

Dirección General de Cultura y Educación (2008): Diseño Curricular para la Educación Primaria. Primer ciclo. Matemática, La Plata.

Diseño Curricular para la Educación Inicial, 2010, Cultura de Educación, Provincia de Buenos Aires, Argentina.

Kandinsky, Vasili, “Curvas libres dirigidas hacia un punto”, en Kandinsky, Punto y línea sobre el plano. Monografía disponible en Internet: www.arquitectuba.com.ar

Rivero, M. y otros (1992): Geometría: aprendizaje y juego, Universidad Católica de Chile.

Tintoretto, El lavatorio (Museo del Prado), Obras Maestras de la Pintura Clásica, Buenos Aires/ Madrid/ Río de Janeiro, Codex.

Vygotsky, Lev (1995): Pensamiento y lenguaje, Buenos Aires, Fausto.