INTERPRETACIÓN DEL CURRÍCULUM
En las propuestas que se presentan, según como se interprete, el curriculum resulta ser un mediador entre el docente y alumno debido al vínculo que se establece entre ambos. Adquiere una preponderancia fundamental debido a que ya no es un ente separado del contexto social, sino parte fundamental de él. Así es que va adquiriendo un significado especial, a pesar que su construcción ya viene dada.
Desde la perspectiva académica es fundamental hacer referencia al curriculum. Además, no se puede prescindir de él. El trabajo parte desde un ámbito educativo formal, a pesar que brinda una interpretación sensible a sus contenidos. Por tal motivo es fundamental pensar en un curriculum como herramienta que ayuda, facilita y orienta a ordenar las ideas pedagógicas, como también la estructura de planificación sobre los contenidos y la evaluación.
Como ya se sabe, el curriculum proviene del ámbito educativo-político, que puede variar según el modelo de estado vigente y generalmente dependerá de esa ideología. Debería proyectarse considerando a la persona que aprende, la realidad del país, del mundo y del futuro. Por tal motivo, su estructura y contenido, debe ser adecuado a la realidad, en espacio y tiempo, con temáticas factibles para que el alumno se interese y necesite salir de él en busca de mayor información.
La interpretación del curriculum por parte del docente es fundamental; cuenta con dos factores de importancia: su construcción y su interpretación. En el primer caso, su construcción, el docente deber priorizar contenidos que permitan trabajar competencias y habilidades esenciales que faculten pensar, reflexionar; que fomenten la autonomía, el autoaprendizaje, la metacognición. En el segundo caso, su interpretación, es el factor de mayor importancia por no depender de terceros, sino de la persona que lo aborda que tiene que contar con flexibilidad, voluntad e interés. Todo dependerá de su formación y disposición para trasmitir las competencias según su convicción.
Los acontecimientos inesperados suceden sin avisar. Por ejemplo, el Covid-19 se ha instalado en la agenda educativa. Ello tendría que poner a luz su significado, observar la situación y las consecuencias. Los docentes deberían preguntarse cómo resultó la experiencia de dar clases online, qué se podría seguir haciendo, qué se cambiaría y cómo se haría.
Y es ahí en donde se necesita poner el acento: qué y cómo trabajar el curriculum y que actitud asumir en situaciones inesperadas partiendo de la experiencia personal.