Construcción literaria y visual única
“El arte de escribir a través del arte de imaginar e interpretar”
Objetivos
- - Lograr concentración favoreciendo la imaginación para que aflore y enriquezca la expresión literaria.
- - Tomar conciencia de lo que es capaz la mente y el espíritu humano cuando se lo incentiva y se lo motiva.
- - Interpretar la imagen y la escritura.
Marco Teórico-Referencial
Escribir es una actividad propia de los seres humanos, y, además, un arte. Sin embargo, es muy importante la motivación o inspiración necesaria para hacerlo. Esta motivación hace referencia al conjunto de estímulos e incentivos que mueven a una persona a actuar de una manera más o menos creativa frente a los obstáculos que se le presenten. Dicha motivación puede ser ejercida en diferentes esferas de nuestra vida cotidiana o escolar, como es el caso de la presente actividad, requiriendo de la persona que lo ponga en práctica gran imaginación y concentración. Ésta, la imaginación, es un proceso abstracto; no necesita de un objeto presente, ella se sirve de la memoria, del recuerdo, toma elementos antes percibidos y experimentados y los transforma en diferentes, en nuevos estímulos y realidades, concretando un trabajo único y original. Ser diferentes es una de las características de nuestra sociedad, por lo tanto al momento de escribir existen una gran variedad de estilos, formas y lenguajes, consecuencia todos ellos, de la diversidad cultural en la que estamos inmersos.
Según Vigotzky (2007), todo lo que el hombre crea como algo nuevo es producto de la experiencia acumulada durante su vida hasta ese momento. No puede existir creación e imaginación si no hay una experiencia vivida con anterioridad.
Justificación del taller
Para llegar a un estilo propio e innovador en el arte de escribir, se necesitan estímulos que provoquen una respuesta a la imaginación, que fluyan para que se liberen y se recreen provocando esa expresión. En este caso, los pasos progresivos de una imagen visual no figurativa y el hecho de que dicha imagen sea realizada por cada uno de los participantes, según sus necesidades y propuestas, genera nuevas ideas y conceptos, o nuevas asociaciones entre ideas y conceptos conocidos o descubiertos en ese momento. Al compartirlo con la escritura, esas ideas y conceptos se transforman en un pensamiento original que adquiere relevancia y significación transformándose en una representación original, única y creativa. El esfuerzo, la concentración y la superación de obstáculos, son parte indispensable de la obra y hacen que ésta sea una expresión literaria única e irrepetible.
Actividad
Síntesis
Los participantes comienzan a escribir una historia, relato, cuento, etc. Un participante dibuja en una hoja única, común a todos, una línea que represente, en forma abstracta, una imagen de su historia. El resto de los participantes incorpora en su texto la idea que tiene sobre la línea que está observando tratando que signifique algo sobre lo que está escribiendo. Luego, pasa otro participante y repite la acción de dibujar una línea de acuerdo a la necesidad que tenga de incorporar esa imagen abstracta a su historia escrita. El resto de los participantes repite la acción anterior. Así sucesivamente hasta que hayan pasado todos los participantes quienes tienen que ir adecuando el rumbo de su historia según vayan apareciendo las nuevas líneas. Se logran expresiones literarias inéditas, únicas e irrepetibles, motivadas por la necesidad de incorporar los dibujos ajenos a la composición literaria propia.
Elementos analizados
- - Imaginación.
- - Incertidumbre.
- - Curiosidad.
- - Esfuerzo.
- - Flexibilización.
- - Superación de obstáculos.
- - Improvisación.
- - Concentración.
- - Pensamiento.
- - Expectativa.
- - Diversidad de pensamientos.
- - Originalidad.
- - Reflexión y la autoevaluación acerca de lo que se hace, de las actitudes y reacciones internas y externas que se pueden manifestar ante lo desconocido.
Recursos
Hoja blanca de aproximadamente 1.00 por 70 a la vista de todos.
Fibra gruesa para dibujar en la hoja.
Papel y lapicera individual.
Desarrollo
El coordinador coloca una hoja en blanco frente a todos y solicita a los participantes que imaginen ver en ella un lugar, un espacio, un motivo, una representación imaginaria más allá del objeto concreto hoja de papel.
- - Los participantes deben crear una historia, relato, cuento o simplemente realizar una descripción, imaginando que esa hoja en blanco puede ser un lugar determinado en el cual sucede algo. Deben escribirlo para iniciar el texto.
- - Uno de los participantes, el que desee, dibuja con la fibra en la hoja blanca a la vista de todos, una línea (evitando la figuración) que simbolice uno de los objetos, momentos o situación que corresponda a su historia, relato, cuento, descripción, etc., de ahora en adelante “texto”.
- - Todos los participantes tienen que incorporar en su texto lo que puede significar esa línea en la propia narración.
- - Luego pasa otro de los participantes y repite la acción de dibujar una línea en la hoja, la que tendrá un significado especial para su narración. El resto de los participantes la incorporan en su texto haciéndola parte de él.
- - Pasa un tercer participante, y así sucesivamente se repite la acción hasta que hayan representado su línea con significado todos los integrantes del grupo sabiendo que, a partir de los últimos en pasar, se debe ir finalizando la narración.
- - Cada una de las expresiones se leen para todo el grupo, respetando al que no quiera hacerlo.
- - Reflexión y evaluación sobre las dificultades e impedimentos, facilidades y capacidades de cada miembro del grupo para ver, imaginar y crear las nuevas situaciones, y los obstáculos que surgieron.
Preguntas finales
1. ¿Qué pensamiento y sensación surgió cuando se escuchó la consigna?
2. ¿Qué sucedió y qué se logró?
3. ¿Podrías exponer tu criterio personal sobre lo realizado?
Relatos de los participantes
Primera pregunta
“En el momento en que escuché la consigna no entendí mucho de qué se trataba, pero después, cuando comenzó la actividad, fui comprendiendo. Me costó tener que pensar a medida que se hacían las líneas y estar cambiando permanentemente la idea o adaptarla a lo nuevo que se veía.” P. S.
“Al principio sentí desconcierto, incertidumbre por no saber bien qué narrar, pero una vez que comencé a escribir, la improvisación y la inspiración que provocaron las líneas en mí, lograron mi creación.” L. A.
Segunda pregunta
“Logré desarrollar una buena historia, también logré superar los miedos y ello me llevó a poder improvisar con cada línea algo propio que me dejó muy conforme.” D. M.
“Sucedió que cado uno narró una historia muy diferente a otra. Se logró abrir la mente y dejar volar la imaginación. Me pareció un trabajo muy original pero que se necesita voluntad para realizarlo, porque en varios momentos me dieron ganas de abandonar todo.” P. S.
Tercera pregunta
“Me gustó mucho la actividad, me parece que nos ayuda a hacernos pensar, participar y abrirnos la mente. En lo personal siento que en cada clase me voy superando, imaginando y creando cosas con un condimento propio que me hace sentir muy bien.” P. A.
“Me gustó ir creando nuevas palabras mientras cada uno colabora con un signo o línea nueva en la hoja, me pareció estar haciendo un juego, o armando un rompecabezas, pero con piezas ideadas por nosotros. Necesité un tiempo para darme cuenta de lo importante de la actividad.” L. C.
Momentos de la actividad en los que se pone en juego los elementos para analizar
Desde el inicio, el hecho de que los participantes tengan que responder a la solicitud del coordinador, quien les coloca una hoja en blanco frente a ellos para que imaginen qué puede ser además de ser una hoja, produce incertidumbre, confusión, curiosidad.
Durante el desarrollo, después del esfuerzo que deben realizar por entender la consigna, tienen que superar el obstáculo que provoca escribir sobre un tema que, a cada cambio de imagen, deben improvisar permanentemente su historia cambiando el rumbo de la primera idea, producto del desarrollo de la actividad.
También en este momento se hace fundamental la concentración al escribir flexibilizando la idea, adecuando permanentemente el pensamiento para ir adaptándolo a la nueva imagen. Nuevamente se hace imprescindible la necesidad de superar los obstáculos para asociar texto-imagen.
Al finalizar el trabajo, reaparecen la expectativa y la curiosidad, esta vez por lo que cada uno escribió. Al leer cada texto se va descubriendo la diversidad de pensamientos y la originalidad de cada uno de ellos. Esto provoca asombro por descubrir la capacidad que cada uno posee para expresarse y alegría por el logro del trabajo realizado.
Por último, la reflexión lleva a una autoevaluación: para los que realizaron la experiencia, porque pone a prueba la capacidad que se posee para crear superando obstáculos, y para el coordinador, para evaluar si su conducción cumplió con los objetivos propuestos.